La comercialización de soja 2019/20 a la fecha –según los últimos datos oficiales publicados– suma 35,1 millones de toneladas, una cifra equivalente al 71,7% de la cosecha de 49,0 millones de toneladas.

Se trata de una cifra apenas medio punto inferior al promedio de comercialización para la misma fecha del año registrada en el último lustro (72,1%), sin considerar la situación presente en 2018, dado que entonces el ritmo relativo de ventas del poroto resultó distorsionado por una sequía que recortó la producción de manera significativa.

La industria aceitera argentina está realizando esfuerzos para originar mercadería en un contexto en el cual la mayor parte de los empresarios agrícolas se muestra reticente a desprenderse de soja ante la creciente inestabilidad cambiaria.

El derecho de exportación efectivo para la soja Rosario disponible, con un valor FOB oficial de 495 u$s/tonelada, se encuentra actualmente en un 25,5%, cuando la alícuota vigente hasta fines del presente mes de noviembre es del 31,5%.

Adicionalmente, algunas industrias y exportadores están ofreciendo condiciones especiales para originar mercadería en el mercado disponible, entre las cuales se incluyen la posibilidad de liquidar la operación con plazo hasta el 31 de diciembre de este año o del 31 de enero de 2021, cuando lo reglamentario es hacerlo el mismo día o pocos días después de la descarga.

La que sí está registrando un retraso considerable es la comercialización de soja 2020/21, que a la fecha suma apenas 3,90 millones de toneladas ante la presencia de un escenario ultra alcista internacional generado por una situación comercial inédita presente en EE.UU.

Tal situación, junto con la dificultad para proyectar la producción por cosechar en 2021 debido a un escenario de restricción hídrica durante el verano, está promoviendo una ralentización de las ventas de soja nueva.